La Junta de Gobierno de 1999 a 2003 se reunió el pasado 9 de marzo de 2024 para conmemorar 25 años del inicio de sus misiones cofrades en un ágape fraterno familiar, regado con el signo de la alegría. En un ambiente relajado, sin protocolo, abierto al diálogo, recordaron proyectos, realizaciones, nombres y servicios ofrecidos a la hermandad de sus amores, que ya forman parte de la historia reciente de San Benito.
Destacaron como inolvidables: La conmemoración del 25 aniversario de la fundación de la primera cuadrilla de hermanos costaleros con un amplio programa de actos iniciados en el salón de conferencias del Palacio de Congreso, continuados en la Casa Hermandad y culminados con una cena festiva, donde se le entregó a don Carlos Morán el título de “Capataz Ejemplar de San Benito”. En el Libro de Memoria del Archivo consta oficialmente que las celebraciones superaron el millar de asistentes.
La salida procesional del Señor en el paso del Cristo de la Sangre conmemorando el 75 aniversario de la hechura de la sagrada imagen y la composición del misterio de la “Presentación al Pueblo” por don Antonio Castillo Lastrucci. Tuvo un ciclo de conferencias y una exposición pública de enseres facilitados por la familia Castillo y el biógrafo del autor.
La restauración del Santísimo Cristo por el profesor de la Escuela de Bellas Artes, don Juan Manuel Miñarro.
Confección de respiraderos en plata de ley para el palio de la Virgen, tallados por “Orfebrería Villarreal” estrenados el martes santo de 2001
El traslado por primera vez de la Virgen de la Encarnación a la Residencia de las Hermanitas de los Pobres.
Institución del día del “Hermano” finalizada la Función a la Virgen.
El hecho novedoso para la época de la organización en noviembre de 2001 dentro de la Semana Cultural de la Juventud un torneo de futbol masculino y otro femenino. Una mesa redonda sobre “La mujer en la sociedad actual” con la participación de figuras de la medicina, el derecho y la política local.
Esta Junta de Gobierno que celebró las bodas de plata de su toma de posesión asentó su labor en la triada sinérgica de “hermandad, parroquia y barrio”. Valoraron a los hermanos como el mejor y el más importante patrimonio de la hermandad.