El pasado 20 de octubre, la Hermandad celebró la primera sesión de la Escuela de Familias, un proyecto que nace con el propósito de ofrecer un espacio de formación, escucha y acompañamiento tanto para jóvenes como para adultos.
La jornada inaugural contó con la participación de un numeroso grupo de jóvenes, que acudieron con entusiasmo y compromiso. En un ambiente de confianza y respeto, pudieron expresarse libremente, compartir inquietudes y reflexionar sobre temas que afectan a su día a día, como la gestión emocional, las relaciones personales y el sentido de comunidad.
La Escuela de Familias está concebida como un espacio abierto, no limitado a hermanos de la corporación, y se estructura en sesiones diferenciadas para jóvenes y adultos. En el caso de los adultos, se busca ofrecer herramientas prácticas para afrontar los retos cotidianos en la educación y acompañamiento de los jóvenes, desde una perspectiva de fe y cercanía.
Este primer encuentro ha dejado una huella esperanzadora y confirma la necesidad de seguir construyendo espacios donde la ternura, el servicio y la fe sean pilares del crecimiento personal y familiar.
La Hermandad agradece la acogida y anima a todos los interesados a sumarse a las próximas sesiones.