Jamás es fácil decir adiós a alguien, pero hay casos en los que aún se hace más difícil. Hemos perdido a una persona muy importante para nuestra Hermandad. Nuestro Hermano D. Carlos Morán Fernández. El que durante tantos años elevaba al cielo de Sevilla a su Señor de la Presentación, ya está \»arriba con el Hijo de Dios\». Nunca te irás del todo, nunca dejará de ser Martes Santo. No podemos decirte adiós, porque un adiós significa irse e irse significa olvidar.
Descansa en paz hermano, permanecerás en nuestros corazones porque solo lo que se pierde es adquirido para siempre.