Manolo Ponce

Imposición de la Medalla de oro

Hablar de Don Manuel Ponce Jiménez es recorrer la historia de la hermandad desde el año 1959 que fue elegido por primera vez como hermano mayor, y reelegido sucesivamente en los Cabildos Generales de Elecciones celebrados en los años: 1959 – 1962 – 1964 – 1966 – 1968 – 1970 y 1972, hasta el año 1976 que finalizó sus servicios en dicho cargo. Falleció el 25 de diciembre de 1979. Antes de la misa córpore insepulto celebrada en la iglesia de la Santa Caridad, le fue concedido por el Consejo General de HH. y CC el título de “Cofrade ejemplar de Sevilla”. En el año 1967, la Hermandad le concedió la Medalla de Oro y en 1975, recibió el nombramiento de Hermano Mayor Perpetuo.

El éxito de las gestiones y hechos de don Manuel Ponce, en gran medida se debió a las personas que formaron en sus distintas juntas de gobiernos. “Capillitas” de solera, comprometidos con sus cargos, le permitieron a su hermano mayor realizar una labor de relaciones abiertas con organismos religiosos, públicos, culturales y sociales. Aquella masa ígnea cristalizó en el florecimiento y prestigio de la hermandad de San Benito en la Sevilla cofrade de la época. Así queda constancia en el Archivo Histórico de la Corporación. 

Manolo Ponce fue sinonimia de San Benito, y a la inversa. Persona abierta, dialogante, afectuosa, ejecutiva. Durante su gestión se incrementó notablemente el patrimonio artístico y humano. Destacamos por importantes los siguientes: Se hizo realidad artística devocional, por donación personal, la imagen del Santísimo Cristo de la Sangre, primitivo titular de la corporación, reconstruyéndose la nueva capilla para su culto, recuperando la parroquia las dos capillas laterales al altar mayor como en tiempos pasados.

Entrega de la Bula Pontificia por el Cardenal

Se logró el título de Pontificia Archicofradía mediante bula firmada por S.S. Pablo VI, fechada el 30 de mayo de 1966.

Colocación de la primera piedra de la Casa Hermandad

El 25 de marzo de 1975 el cardenal Bueno Monreal bendijo la Casa de Hermandad colindante con la parroquia. Un lugar de trabajo administrativo y de relaciones fraternales.

El cambio nominativo de “capillita” por “cofrade” se produjo como consecuencia de las disposiciones del Concilio Vaticano II sobre los laicos, y por las conclusiones del Sínodo Hispalense de 1973. El concepto de “Religiosidad Popular”, religión del pueblo, aplicado a las cofradías, popularizó el término “cofrade” a todo fiel perteneciente a la riqueza eclesial de las hermandades y cofradías.

Ilustres cofrades abrieron las hermandades a la sociedad poliédrica basados en una nueva evangelización transmisora de la fe, aleando culto y cultura como pilares de sostén de los nuevos tiempos. El último cuarto del siglo XX, desde la perspectiva actual está considerado como la “Edad de Oro de la Religiosidad Popular”. Ahí está inscrito el nombre del ilustrísimo señor don Manuel Ponce Jiménez, hermano mayor perpetuo de la hermandad de San Benito y cofrade ejemplar de Sevilla.